Si echamos la mirada atrás, todos recordaremos esas imágenes, las primeras del cine mudo, de un tren humeante -¡y contaminante!- corriendo raudo y veloz sobre sus vías, atestado de pasajeros en vagones con asientos de madera, donde la gallina viajaba junto al dueño en clase tercera, mientras otros lo hacían en lujosos salones aterciopelados, en primera clase gran lujo... y competía con diligencias tiradas por caballos porque ni existían aún las carreteras y los primeros automóviles eran más una frivolidad para ricos que un medio seguro y cómodo de locomoción.
Qué tiempos aquello de los "caminos de acero" que cruzaban Europa hasta Siberia o lograban a través de rectas interminables hacer el "coast to coast" entre Nueva York y Los Ángeles, o bajar la cordillera andina enfilando riscos e interminables montañas. En torno a sus paradas nacieron grandes ciudades, y, en torno a estas, grandes indústrias, que exportaban sus mercancías llenando vagones y vagones de productos manufacturados, agrícolas o ganaderos que llegaban pocos días después a miles de kilómetros de su origen.
Fue la democratización del viaje; fue la puerta a los desplazamientos masivos de la población en todos los continentes; fue la expansión sin límites de culturas, economías y extraños rostros y apellidos venidos allende las fronteras.
Fue sin duda el primer gran factor de globalización. Luego vendrían los automóviles, los aviones, el teléfono, la televisión, internet...
Y todo esto viene a cuento porque acabo de llegar de Madrid en tren, y en Zaragoza, donde me ha dejado el AVE, me venían a la cabeza las noticias que RENFE y ADIF (Gobierno de España) nos han regalado la pasada semana a los riojanos para estas Navidades: soterramiento y más de 180 millones de euros para la primera fase, dos trenes ALVIA para Barcelona y Madrid con paradas en Logroño y en Haro, Calahorra y Alfaro a partir de febrero, y los estudios informativos para la Alta Velocidad para todo el corredor del Ebro con la promesa de desarrollar esta importante infraestructura a la vez que se desarrolla la del AVE a Pamplona y la Y vasca.
Buenas noticias y esperanza de que ese AVE que me deja en Zaragoza -¡qué maravilla de viaje!- me deje lo antes posible en la puerta de mi casa. Ese día muchos jubilaremos el coche para grandes desplazamientos porque Logroño-Madrid en menos de tres horas, leyendo, comiendo, charlando, relajados, frente a la Autopista-Autovía, los elementos climatológicos, la contaminación, el stress, etc, no tiene color. De momento con el ALVIA a Zaragoza y desde allí con el AVE a Madrid o Barcelona.
¡Qué gozada poder volver a sentir lo que sin duda sintieron los primeros viajeros de esos monstruos de acero que les acercaban las esperanzas de una vida mejor entre bocanadas de vapor y sueños relajados en bancos de láminas de madera!
P.S.: otro día os contaré la intrahistoria de porqué ciertos políticos de derechas nunca quisieron desarrollar estas infraestructuras de ferrocarril y porqué sólo desde que Zapatero es Presidente y los socialistas hemos vuelto a tener la responsabilidad de gobierno España será el país del MUNDO con más kilómetros de vías de alta velocidad en el año 2010. Es para alucinar con estos peperos.
1 comentario:
Hola FranK:
Los grades ejes economicos se crean a traves de las comunicaciones. Eso es asi y en la historia tenemos casos ejemplares. Buenas comunicaciones,buenas carreteras, servicio de ferrocarril, aeropuertos etc. son sinonimo de desarrollo economico e inversion a futuro.
Esta es una gran medida que tendra repercusiones en todo tipo.
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