El nivel político en La Rioja.

Ver como todo un Presidente de La Rioja -que no de todos los riojanos- alienta a una Diputada, y Alcaldesa del PP de un pequeño municipio, a hacer una descalificación personal de otra Diputada, del PSOE, al no tener ni un solo argumento político o técnico para no aprobar una proposición no de Ley relativa a mujeres y nuevas tecnoologías es lo que nos quedaba por ver y por soportar en nuestro Parlamento.
El nivel patibulario, casi canallesco, que Pedro Sanz imprime a los representantes del PP en el Parlamento es insoportable. Porque no es que personas sin ética se presten a ser auténticos perros -o perras- de presa: esto hasta lo vería normal, de algo tienen que vivir. Pero ver como personas cultas, educadas, de derechas, sí, pero "romanizadas", se convierten en auténticos indeseables de la palabra o del hecho, es algo que sólo sucede aquí, en La Rioja, y con Pedro Sanz de muñidor (este último caso en absoluto es descriptivo de la Diputada del PP de la que hablo, que más bien sería de los que considero normal que sean a imagen y semejanza de Pedro Sanz, porque de algo tienen que vivir...)


Lo de ayer fue lamentable. Y más lamentable que ningún medio de comunicación recoja hoy cómo la Diputada del PP, Ana Lourdes González, ante la evidencia de no haberse preparado nada en contestación a la iniciativa de la Diputada Emilia Fernández, del PSOE, en torno a un tema sectorial muy concreto, se dedicó durante cinco minutos a insultarla personalmente y a descalificar su iniciativa poco menos que presentándola como una "estúpida ignorante que nos hace perder el tiempo con chorradas de mujeres". Y Pedro Sanz aplaudiendo esta actitud, jaleando desde su escaño, con esa cara de mala persona -que es, y mucho- y marcando territorio entre sus filas: "así os quiero a todos, como unos impresentables perros de presa". Vaya nivel político hay en La Rioja, y que pena da sufrirlo.